El mercado gris

El mercado gris es un término proveniente del inglés (grey market) que se refiere al flujo de mercancías que se realiza a través de los canales de distribución diferentes a los autorizados por el fabricante o el productor.

A diferencia del mercado negro, las mercancías ‘grises’ no son ilegales. Sin embargo, están siendo vendidas fuera de los canales de distribución de las compañías y pueden no tener ninguna relación comercial con el productor de las mercancías.

Esto ocurre con frecuencia cuando el precio de un artículo es perceptiblemente más alto en un país que en otro; esta situación ocurre comúnmente con los cigarrillos o equipos electrónicos tales como cámaras fotográficas, celulares, computadoras, vinos y licores, etc.

Los empresarios compran el producto donde está disponible a mejor precio, a menudo en la venta al por menor, pero a veces también en el canal mayorista, la importan legalmente al mercado objetivo y la venden un precio por debajo del precio de la marca.

La importación de ciertos artículos legalmente restringidos tales como drogas o armas de fuego sería categorizada como mercado negro, al igual que pasar de contrabando mercancías al país objetivo para evitar el pago de aranceles. Un concepto relacionado es el bootlegging, que implica normalmente la fabricación o distribución de mercancías falsificadas pero también describe la distribución ilegal de las mercancías muy reguladas, especialmente bebidas alcohólicas.

El fabricante rechazará generalmente respetar la garantía de un artículo comprado de fuentes grises del mercado. Esto es particularmente evidente en mercancías electrónicas.

Los fabricantes pueden dar diferentes números de modelo en diversos países aunque las funciones de la máquina en particular sean idénticas. Cuando un fabricante identifica un producto en concreto como no destinado para ese país particular, el comprador puede entonces buscar solamente el servicio de garantía de la filial del fabricante en el país previsto de importación, no en el tercer país en donde las mercancías grises son vendidas en última instancia por el distribuidor o minorista.

En las últimas semanas, distintos fabricantes de celulares (ZTE, Motorola, Oppo, Xiaomi y Samsung de momento) enviaron notificaciones a sus clientes para avisarles que su dispositivo sería bloqueado. Las personas, confundidas, buscaron respuestas en las redes sociales para entender el porqué de esta situación, y es que la circulación de celulares es masiva y su procedencia puede pasar entre distintos usuarios sin mucho contexto de dónde fue adquirido inicialmente.

En éste ejemplo, es mercado gris cuando alguien compra un celular de importaciones paralelas, es decir, de un vendedor no autorizado por el fabricante ni por el país para su funcionamiento.

Según la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), estos dispositivos no cumplen los procedimientos legales como la certificación, el etiquetado de las Normas Oficiales Mexicanas (NOM), la garantía y la recolección de impuestos, lo que ha obligado a fabricantes a desactivar estos dispositivos, que representaron 20% de las ventas de celulares en México en 2022, según la consultora IDC.

Este tipo de comercio es impulsado por la alta demanda de celulares, la inflación y la facilidad de compras en línea y en redes sociales. Algunos fabricantes están ofreciendo soluciones y descuentos para sus clientes, pero en el futuro será indispensable contar con una asesoría confiable que evite estos procedimientos.

Una manera segura de adquirir dispositivos es acercarse a las tiendas oficiales y a los distribuidores autorizados, como es el caso de Elektra, cadena de tiendas fundada en 1950 que distribuye, entre otras cosas, teléfonos celulares con la garantía de que cada teléfono cumple con las normas y regulaciones, proporcionando tranquilidad y confianza.

La empresa además pone a disposición sus tiendas oficiales en caso de haber recibido notificaciones sobre un bloqueo inminente en su celular para ser guiado en adquirir un nuevo dispositivo que cumpla todas las garantías y regulaciones necesarias para un funcionamiento correcto donde siempre esté conectado.

Para identificar un dispositivo móvil legal en México, es necesario buscar el sello NOM en el empaque del producto, esto indica que el teléfono fue adquirido a través de canales legales y, por lo tanto, respaldado por las garantías adecuadas que evitarán cualquier sanción.

El mercado gris sigue en evaluación. El pasado 19 de octubre la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) llamaron a la suspensión inmediata del bloqueo de teléfonos celulares y llamó a fabricantes a formar parte de una mesa de trabajo para identificar las medidas y hacer frente a los retos de este tipo de comercio.

Esperemos a ver en qué acaba esta historia…

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