En un sistema de salud lleno de carencias, los ciudadanos ven como una mejor alternativa, a los consultorios particulares y anexos a farmacias populares, porque saben que a diferencia del IMSS, ISSSTE u otro servicio público, serán atendidos rápido y con garantía de contar con todos los medicamentos necesarios… “aunque haya que pagar”… “la salud es primero”.

Desabasto de medicamentos, largas filas de espera y el riesgo a perder la cita en caso de sufrir un contratiempo, son algunas de las causas por las que millones de mexicanos prefieren atenderse en consultorios particulares con farmacias adyacentes en lugar del IMSS o cualquier otra institución de salud pública.

Además de lo anterior, no es un secreto que el colapsado sistema de salud, que por más de 30 años ha sido castigado y desmantelado, ha dado pie a la proliferación de estas clínicas y consultorios particulares, que bajo el slogan ‘lo mismo pero más barato’ del Dr. Simi, atienden a miles todos los días.

Pero no son los únicos, pues vemos consultorios de farmacias como San Pablo, Del ahorro, y hasta los supermercados Walmart ya cuentan con sus doctores para atenderte.

Asi lo comprueba la encuesta que la muy destacada Lorena Becerra (consultora y analista política, así como encuestadora) levantó recientemente y que se distribuye profusamente en medios y en redes sociales.

No es propósito de este articulo hacer publicidad al empresario, ni a ninguno de estos servicios particulares, y tampoco atacar las medidas tomadas por el goberno actual, sino destacar que por más que otras encuestas señalen la mejora según la presidencia, se quedan cortas al lado de lo que la señorita Becerra ha presentado.

Tambien sólo basta con darse una vuelta por esos laboratorios clínicos, cuyas iniciales son SD, que atienden diariamente un gran número de pacientes que requieren de algún estudio, análisis o proceso médico, y constatar que lo hacen con la rapidez, buena atención, control y eficiencia a precio razonable, que sí se pueden comparar con los laboratorios daneses, en definitiva.

No hay duda de la calidad de los estudios demoscópicos de doña Lorena, quien levantó 600 encuestas telefónicas, celulares y teléfonos fijos a mayores de 18 años y que tiene un margen de error de estimación muestral del 4%.

Otro costo político que la 4T paga por la corrupción, la lentitud y en general, su enorme ineficacia para atender pacientes y surtir a sus farmacias de medicamentos necesarios.

¿O tú qué opinas?